Hemos tenido cienes y cienes de quejas porque os llamé malolientes ayer.
Os pido perdón pero con la boca pequeña, porque lo sigo pensando. Jejeje.
Mirad cómo canto: «No me importa naaaaadaaaaaaaa…»
¿Quién se atreve a dibujarme con cuernitos?
Hasta la próxima, tormentos.